Cabecita loca

A mediados de diciembre participaremos en el mercado medieval de Azuqueca. Total, que estos días previos estamos cosiendo mucho, mucho.

Estamos haciendo diademas, porque en muchas ferias la gente se acercaba preguntándonos por ellas. Así que, nos hemos liado la manta a la cabeza, hemos sacudido los pájaros de la cabeza, nos hemos puesto cabeza abajo a ver si fluían las ideas y... misión cumplida. Hemos recordado la técnica de hacer flores con tela que nos enseñó una amiga hace algunos meses y las hemos convertido en diademas. Para la cabeza, claro... Porque si en nuestras cabezas tenemos pájaros, ideas y una manta que nos liamos de vez en cuando, también hay que hacer espacio a nuestras diademas.

Por cierto, no todas las diademas son de flores. ¿Adivinas qué elemento presente en nuestro nombre nos servirá para diseñar otro modelo de diadema? La respuesta en una próxima entrada.