Gracias desde nuestra nube...

Estamos en una nube. Una nube blanca, de algodón, mullidita, mullidita. Una nube en la que nos sentimos tan cómodas que no nos queremos bajar. Subimos a esta nube con una escalera de letras y palabras, que nos prestaron en el Maratón de Cuentos de Guadalajara. Al principio no tenía muchos peldaños, pero las palabras cariñosas de la gente los fueron haciendo aparecer poco a poco: "qué bonito", "me encanta lo que hacéis", "qué original", "está visto que no se puede tirar nada", "vamos a hacer un post en nuestro blog sobre vuestro trabajo", "esto es perfecto para mi hermana"... y así, palabra a palabra, fueron surgiendo nuevos peldaños y nos fuimos elevando hasta que conseguimos tocar la nube e instalarnos en ella.

Y aquí seguimos, empaquetando millones de gracias para regalárselos a las personas que organizan cada año el Maratón; a los artesanos y artesanas con quienes compartimos fin de semana; a los libreros y libreras que tuvimos en frente y que visitábamos para ojear un cuento de vez en cuando; a todo el que contó en el maratón y a cada persona que se detuvo en el puesto de 'Debajo de un Botón' y nos dijo que le encantaba lo que hacíamos.

Ya hemos empaquetado muchas 'gracias' (con lazos reciclados, por supuesto) y hemos querido empezar a repartirlas en este blog. Gracias por la experiencia, por las palabras cariñosas hacia nuestro trabajo, por los cuentos, por la magia, por la compras y por las no compras. Gracias por potenciar la palabra y por constatar que un apagón no es nada porque el Maratón brilla con luz propia.

Seguiremos en esta nube unos días haciendo paquetitos de 'gracias' para seguir repartiendo. Sólo unos días, que tenemos que seguir cosiendo y recorriendo la provincia. ¿Podremos viajar en nube?